¿Ha llegado el otoño y han desaparecido esas ganas de hacer las cosas que tanto tenías? ¿Tu energía y animosidad también ha desaparecido? ¿Te cuesta hacerlo todo? ¿Aparece el cansancio y la debilidad? No hay duda, estás padeciendo astenia otoñal.
Hay que mantener la calma y tener claro que este bajón otoñal tiene que ver con que haya menos horas de luz solar y, por tanto, surja un desajuste hormonal, por ello, debemos darle al cuerpo el tiempo suficiente para “reajustarse”. Es algo temporal, por tanto, a medida que el cuerpo se acostumbra, vuelve la energía, tal vez no la misma que en verano, pero la suficiente como para dejar de sentirte mal, triste o débil y continuar con nuestra vida cotidiana con toda normalidad.
Una ayuda interesante para sobrellevar la situación es intentar dormir bien, mantener una dieta equilibrada y dar un paseo de unos treinta minutos, aprovechar al máximo todas las horas de sol, tanto en la calle como en casa o el trabajo y las ventanas siempre arriba.
Lo mejor, buscar una rutina: Levantarnos y acostarnos a la misma hora, mantener las horas de las comidas durante la semana y pasear cuando haya luz solar, yendo a trabajar andando o aprovechando alguna hora en la que no tengamos responsabilidades. Verás como en poco tiempo va desapareciendo ese molesto bajón que te hace sentir tan mal.
